Holanda, misión cumplida
Con lo que se tiene, sin cambios importantes, Holanda aprovechó el encuentro cantado con Camerún para sacarle punta a su estrategia. Eso podría leerse en la pizarra del entrenador, Bert van Marwijk.
En las páginas de Deportes se leía en las horas previas al partido sobre el escándalo de Francia, la eliminación de Italia, y del “Plusje¨ (Pelusa). Como en la publicidad de TyC Sports, los holandeses admiran el juego “con el corazón” y festejan los arrebatos emocionales del Diego.
Pero volvamos al partido contra los africanos. No fue difícil sacar cuentas para que la suma diera a favor del líder del grupo E. El juego fue calculado, seguía el esquema de Van Marwijk. Van Persie cumplió y salió del campo, a resguardarse de una amonestación que lo dejara fuera del encuentro del lunes con Eslovaquia.
Para lo que no había planes era para ese brazo de Van der Vaart y el penal que igualó 1 a 1 el marcador. Ese gol desanimó a los anaranjados. Los cameruneses gozaban de una licencia para arriesgar. Llegaron descalificados y no se irían sin intentar al menos salvar el honor.
Hizo falta el ingreso de Eljero Elia y el retorno de Arjen Robben – también calculado de antemano-, para rehacer el camino. Pero fue Klaas Jan Huntelaar, aprovechando el rebote en el palo derecho de un disparo de Robben, el que le devolvió el ánimo al seleccionado.
Dos a uno, al final. El staff compartió un apretón de manos y selló el encuentro. ¨Missie voltoid¨ (misión completa). ¡Qué lejos se está de los arrebatos de Maradona!