Holanda no deja dudas, deja goles
El 2-0 contra Chile “es el resultado de un juego súper efectivo”, analizó Johan Cruyff al término del partido. “Cuando encontraron el espacio no lo desaprovecharon”, agrega el Flaco. Y así fue. La roja podía dominar la pelota, pero las oportunidades no las desaprovechó Holanda, con un Arjen Robben que se corrió todo y que dejó servido el segundo gol que convirtió Depay. El primero lo metió de cabeza y con clase el joven jugador de Norwich City, Leroy Fer.
Un esquema elegido que, curiosamente, enarbola los goles embocados en los tres partidos jugados hasta ahora, en catorce días: 5-3-2.
La estrategia de Van Gaal consistió en darle alas a dos delanteros y cerrarle el paso a Chile con una firme defensa, incluyendo a un Daley Blind que tuvo a raya a Alexis Sánchez (un twittero chileno contaba siete faltas contra el jugador del Barcelona).
¿Queda alguna duda de las chances de este equipo? El periódico De Volkskrant comparte mi optimismo y pregunta, parecido, ¿quién se atrevía a soñar con este resultado? El pase a octavos de final y su posición al frente del Grupo B con nueve puntos despejó muchos fantasmas, como el de su capacidad para reponerse, como el de su previsibilidad, el miedito a Chile, las dudas del 3 a 2 contra Australia… Y encima, como broche de oro, se dio el gusto de torear a Brasil, dejando a los chilenos expuestos en bandeja, a la espera de un probable encuentro contra La Canarinha.
Una de las anécdotas de la jornada de hoy la recogemos de boca de Robben, cuando un cronista le preguntó cuál es el secreto de los cambios “de oro” de Van Gaal, capaz de cambiar a Lens por Depay y a Sneijder por Fer, los autores de los dos goles. “No sé, tal vez tiene un gallo de oro”, respondió sonriendo.
¿Qué quiso decir?