De un plumazo
En sólo cuatro días, San Lorenzo de Almagro pasó de ser el único puntero del Torneo Apertura, con una cómoda ventaja de cinco puntos, a verse obligado a compartir la cima con el sorprendente Tigre.
La imprevisible derrota ante Racing del Ciclón en Avellaneda y el inesperado empate como local ante el pobre conjunto de Gimnasia, hizo posible que la excelente campaña del equipo conducido por Diego Cagna se vea reflejada en la tabla de posiciones.
Pero además, esos cinco puntos que perdió el equipo de Miguel Angel Russo sobre los últimos seis disputados, posibilitó que aparezca en escena otro candidato «peligroso» como Boca Juniors, que metió una arremetida bárbara y, en apenas diez días, pasó de estar a 8 unidades del líder, a quedar a sólo 3, exactamente cinco días antes de recibir al otrora cómodo puntero.
El match que se disputará en la Bombonera el próximo domingo será, sin dudas, un partido bisagra. San Lorenzo puede utilizarlo como trampolín para volver a escaparse, amparado en la paternal historia que tiene en este clásico. Pero Boca, con la frescura de sus pibes, puede pisotear lo escrito en los libros y alcanzarlo en la tabla.
Además, de producirse una nueva derrota del azulgrana, Tigre podría sacar una ventaja de tres unidades, en caso de dar un nuevo batacazo y superar a Argentinos Juniors en la Paternal.
Sería, sin dudas, un momento histórico. Con el equipo de Victoria mirando al resto de los competidores desde lo más alto. Algo más que merecido.