No al Burrito
Quienes leen Dame Pelota desde hace rato ya sabrán que a mí me gusta el fútbol bien jugado, y que soy amante de aquéllos jugadores que se brindan por el espectáculo, sin importarme la camiseta que vistan.
Ariel Ortega forma parte de esa lista de jugadores que me gusta ver dentro de un campo de juego. Siempre.
Sin embargo, me parece una ridiculez y una desconsideración para con el resto del plantel de River que algunos medios (el Olé, por caso) le meta presión a un Passarella que no pasa por su mejor momento como DT de River, descalificando sus palabras acerca de que Ortega no será tenido en cuenta para el domingo, argumentando que el Millo tiene a Farías y a Falcao lesionado, y sumando una declaración del propio Ortega diciendo: «Pago por jugar el domingo».
Poner a Ortega en el clásico ante Boca no sólo sería una falta de respeto para los jugadores que entrenan diariamente en River, sino que sería un acto de demagogia e iría en contra de las mismas convicciones del DT, que lo cuidó siempre al Burrito con su enfermedad, y que lo quiere bien como persona, antes de considerarlo otra vez apto para jugar al fútbol.
Si se lo propone, River puede jugarle (y ganarle) a Boca sin Ortega.
Al mismo tiempo, si se lo propone, Ortega puede salir de su problema e incluso volver a divertir a la gente con una pelota de fútbol.
Por eso le dijo que No a Ortega. Porque le tengo cariño, porque me parece un jugador fenomenal y porque, tal vez, ese tremendo dolor que le provoca quedarse afuera del superclásico del próximo domingo le sirve para seguir buscándole la salida a su problema con el alcohol.