David, a la final: «Ojalá pueda seguir así durante todo el año»
Por Felipe Cáceres
desde Auckland
Cuatro partidos, y cada uno un rival por descubrir. Por primera vez en el ATP de Auckland, David Nalbandian debía medirse ante un jugador mejor posicionado que él.
Nicolás Almagro, parecía una amenaza en la gran semana del argentino. Sin embargo, no dio muchas luces de su puesto número 14: falló demasiado y terminó entregándose por 6/4 y 6/2 ante la solidez del cordobés, que de paso alcanzó la primera final del año.
Mañana no habrá Goliath y el rival será ni más ni menos que David Ferrer, número 7 del ranking ATP y preclasificado número uno del torneo. A eso de las 14.30 hora local (22.30 Argentina), el «rey» David, irá definitivamente por su primera corona 2011.
Bajo un intenso calor en el mediodía neocelandés, la determinación fue el arma principal del argentino para batir a un jugador de características similares, con mucha orientación de la cancha y con una muñeca capaz de salvar la situación en puntos importantes, y que también tiene como gran objetivo para este 2011 estar entre diez mejores jugadores rankeados del circuito.
Por un cupo en la final, decididamente Nalbandian fue más: anticipó las jugadas, fue astuto y escondió la pelota cuando el español se vio más confundido. El hecho, es que venció a un top 15 y ya se siente al nivel de los mejores, aunque le cuesta reconocerlo: «Es difícil saber, pero bueno, a medida que voy jugando con ellos se pueden ganar y perder partidos como muchos otros, pero creo que estoy muy bien y ojalá pueda seguir así durante todo el año», explicó.
En el horizonte aparece Ferrer. Con gran currículo: 7 del mundo y quien venció con mucha comodidad al colombiano Giraldo (64º ATP) para acceder a la final de mañana. La previa es extensa, ya que desde el año 2002 hasta 2010, han sido 11 los enfrentamientos entre ambos. Eso sí, el ultimo fue para David, en un superficie parecida a la de Auckland, cuando se midieron por la primera ronda del Mastes Series de Toronto en un largo partido a tres sets: «Mañana será partido duro como lo fueron todos los partidos que jugamos en contra, partidos largos donde corremos mucho y hay muchos buenos puntos. Son partidos muy lindos y divertidos de jugar y sólo tengo que seguir planteando mi juego y a esperar lo que salga», confidenció Nalbandian, tras cerrar una jornada en la que se dio a conocer el sorteo del Australian Open, en donde se verá la s caras con el local, ex número uno del mundo y su verdugo en aquella inolvidable final de Wimbledon 2002: Leyton Hewitt. Pero para eso aún falta…